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lunes, 6 de abril de 2015

Arañas saltadoras


   ARAÑAS SALTADORAS
Pequeñas, robustas, dotadas de unos enormes ojos centrales. Las arañas saltadoras o saltícidos son unos agiles depredadores capaces de saltar distancias considerables para caer encima de sus presas o para librarse del acoso de sus enemigos. La inusitada destreza de las arañas saltadoras les permite capturar a sus presas incluso en el aire. Sus ojos centrales parecen dos enormes lupas que le proporcionan cualquier detalle y le proporcionan una enorme precisión en sus saltos.

CLASIFICACIÓN
Tipo: Artrópodos
Subtipo: Quelicerados
Clase: Arácnidos
Orden: Arañas
Suborden:  Aracnomorfos
Familia: Saltícidos

LA CAZA
Los saltícidos son depredadores activos: no construyen trampas de seda, sino que buscan a su presa. En cuanto la detectan ponen en funcionamiento un complejo sistema de aproximación basado en su gran capacidad de visión y sus movimientos rápidos, aunque sin brusquedades. En el momento en que logran situarse a la distancia adecuada, emplean sus dos ojos centrales para calcular la distancia exacta hasta su víctima para saltar sobre ella a gran velocidad. En cuanto le caen encima la sujetan con sus patas anteriores y le clavan los quelíceros para inyectarle el veneno.

EL CORTEJO
La danza que levan a cabo los machos de las arañas saltadoras en el cortejo es espectacular. En muchas de estas especies los machos son más vistosos que sus compañeras, pues lucen vivos co
lores rojos, azules, blancos, negros y amarillo en sus patas y en sus pedipalpos, y mediante rítmicos y estudiados movimientos manifiestan a la hembra su intención de copular. Esta observa la danza del macho atentamente puesto que es capaz de reconocer en ella el estado físico del pretendiente, aspecto fundamental para decidir si es el individuo adecuado con el que tener descendencia. Una vez que lo ha aceptado le acompaña en algunos movimientos hasta que tiene lugar el acercamiento definitivo en el que el macho introduce sus pedipalpos en el epígono femenino y deposita su esperma.
EL NIDO
Aunque los saltícidos no construyen telarañas para casar, sí que son capaces de producir seda, y la utilizan tanto para fabricar el hilo de seguridad que emplean durante el salto como para construir el nido de seda en los que se refugian durante el invierno. Estos nidos son relativamente grandes y suelen tener forma de saco, con una abertura en cada extremo. En su interior se refugian tanto en la noche como en los fríos meses de invierno, aunque también es usado con otros fines, como para proteger las puestas y las crías recién eclosionadas. La hembra deposita los huevos en pequeños saquitos con forma de lenteja, que adhiere a las paredes del nido y permanece junto a ellos todo el período de desarrollo. Incluso cuida de sus crías en las primeras fases de su vida, hasta que aprenden a cazar por sí mismas.

EL CRECiMIENTO
El crecimiento de las crías tiene lugar durante la muda de la cutícula externa, cosa que llevan a cabo varias veces a lo largo de su vida. Las primeras mudas tienen lugar en el interior del nido, pero a partir del momento en el que las arañas se independizan, cada vez que mudan, construyen una cámara de seda y se refugian en ella. Esta protección es necesaria después de la muda, pues se muestran muy vulnerables a los depredadores al no tener su exoesqueleto la consistencia necesaria.

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